15 mayo 2006

zona-zero.net

Parece que en los últimos tiempos cambiar de idioma es una tendencia en los grupos nacionales. Muchas son las bandas que se expresaban en inglés y que ahora han pasado a hacerlo en español: Standstill, Sidonie, Deluxe, Love of Lesbian… A ellas pueden sumarse los extremeños Bloomington, que acaban de editar su nuevo álbum, “Activando La Disidencia”.

Llevan más de 10 años como grupo pero, a pesar de esta dilatada carrera, la verdad es que no son muy conocidos. La impresión que me da es que han sido siempre la “hermana fea” del indie rock español. (Y como muestra un botón: son oriundos de mi ciudad natal, Cáceres, lugar donde no hay demasiados grupos conocidos… y aunque su nombre me suena de toda la vida, no los había escuchado hasta hace poco tiempo).

El cambio más notable que han experimentado Bloomington en este nuevo disco es el del idioma, como ya he mencionado antes, pero no acaban ahí las novedades: han pasado de ser un trío a un cuarteto con la inclusión de una segunda guitarra. Contrariamente a lo que pueda parecer, a pesar de esta incorporación su sonido no se ha vuelto más guitarrero y contundente, sino que este es su disco más desnudo, en el que apenas utilizan la distorsión.

Los nueve temas incluidos en “Activando La Disidencia” sorprenden, sobre todo, por la calidad de las letras. Se agradece que los grupos tengan algo que decir, sobre todo cuando cantan en español y se entiende todo. Bloomington no emplean esas rimas facilonas o aquellas historias insulsas a las que estamos tan acostumbrados: van directos a la yugular con letras combativas e inspiradas, con canciones que son una mezcla de amargura y esperanza. Mención especial merecen temas como “Madrid Rock”, en la que cuentan su versión del asunto (vamos, la que no salió en la tv) o “Trenes Rigurosamente Vigilados”, cuyo título nos trae a la cabeza irremediablemente cierto día de marzo.

El primer tema del álbum es “Empezar Otra Vez” (buen título para comenzar un nuevo disco), que enlaza con “No Todo Está Perdido”, pop rock de estribillo pegadizo. “Cuando Fuimos Reyes” muestra la parte más intimista de la banda, mientras que el lado animado lo encontramos en “La Corporación”, uno de los temas más poperos y bailables del disco. “Lear”, con 10 minutos de duración, la mayoría de ellos instrumentales, es el más intenso.

Activando La Disidencia” es un disco que entra fácilmente, aunque no seas especialmente aficionado al indie rock patrio. El principal “pero” que le veo es, como en la mayoría de los grupos de este estilo, la voz. José Tato hace gala de un timbre un tanto peculiar y de una pronunciación que parece forzada en ocasiones (¡esas “eses”!), pero la sangre no llega al río y la cosa no pasa de una ligera extrañeza la primera vez que se oye. En definitiva, estamos ante un disco bien construido, coherente y homogéneo, puesto que todos los temas van en la misma línea, pero sin hacerse monótonos. Los 35 minutos pasan volando e invitan a una segunda escucha. Bloomington la merecen, sin duda.

Texto: Marta Mariño

No hay comentarios: